La empanada gallega es mucho más que un simple plato. Es un símbolo de la cultura gallega, un legado culinario que se ha transmitido de generación en generación durante siglos.
Origen incierto:
Su origen se remonta a la época de los celtas, quienes elaboraban una especie de pan plano relleno de carne y verduras. Con la llegada de los romanos, la receta se enriqueció con nuevos ingredientes como el trigo, el aceite de oliva y el vino.
Evolución a través de la historia:
Durante la Edad Media, la empanada se convirtió en un alimento popular entre los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela. Era un plato fácil de transportar y compartir, ideal para las largas travesías.
En los siglos posteriores, la empanada se consolidó como un plato fundamental en la gastronomía gallega. Cada región desarrolló su propia variante, con diferentes rellenos e ingredientes.
La empanada en la actualidad:
Hoy en día, la empanada gallega es un plato omnipresente en Galicia. Se puede encontrar en restaurantes, bares, panaderías e incluso en los hogares gallegos.
Más que un plato:
La empanada gallega es una parte importante de la identidad cultural gallega. Es un símbolo de unión familiar, de celebración y de compartir.
Variedades:
- Empanadas de pescado: La más popular es la rellena de atún pero también las hay de bacalao, bonito, xoubas (sardinas), congrio, lamprea o anguila.
- Empanadas de mariscos: Rellenas de zamburiñas (pequeñas vieiras), pulpo, berberechos, mejillones o chocos.
- Empanada de carne: Estas empanadas están rellenas de raxo de cerdo (lomo adobado), zorza, carne picada de cerdo o conejo.
Consejos para disfrutarla:
- La empanada gallega se puede comer caliente o fría.
- Se suele acompañar con un buen vino tinto o blanco.
- Es un plato perfecto para compartir con amigos y familiares.
¡La empanada gallega es un tesoro culinario que hay que descubrir y disfrutar, y dónde mejor que en Pulpería Can Lampazas!